Al participar, conjuntamente con el subsecretario del Empleo de la STPS, Marath Bolaños López, en un encuentro con integrantes de la Cámara de Comercio de Australia y Nueva Zelanda, Alcalde Luján destacó cuatro ejes de esta nueva política laboral:
Primero, la política de fortalecimiento del salario mínimo, un trabajo tripartito (gobierno, empresarios y trabajadores) fundamental, que no se había hecho en los últimos 40 años, para revertir la caída del 75% del salario mínimo y lograr aumentos de 51%, afirmó. “La idea es continuar con estos incrementos hasta lograr la meta en que cada familia pueda tener lo mínimo indispensable para el que trabaja y un dependiente económico con este salario”.
Segundo, sostuvo Luisa Alcalde, la reforma laboral permite la implementación de un modelo de libertad sindical, negociación colectiva auténtica y un nuevo modelo de justicia, que resuelve en 45 días, si se concilia, y 6 meses, si llega a los tribunales laborales, los conflictos entre trabajadores y empleadores, antes era un proceso de 4 a 6 años en promedio. Igual, hay un empuje en materia de libertad sindical, donde sea la decisión de los trabajadores la que elija a sus liderazgos a través de votaciones, en contextos de no represión y garantías de libertad, añadió.
En tercer lugar, la reforma en materia de subcontratación, avanza con una manifiesta voluntad empresarial de cumplir con la nueva normatividad y terminar con esquemas abusivos para evadir responsabilidades laborales y con ello afectar a los trabajadores.
Aclaró que la STPS no tiene facultades para nuevas prórrogas de la entrada en vigor de la reforma, que inicia el 1 de septiembre, pero ello no significa que el Registro de Empresas y Servicios Especializados (Repse) cierre, éste se mantendrá abierto, y si alguien no logró hacer el trámite lo podrá hacer más adelante. “No tiene facultades la Secretaría del Trabajo para prorrogar y no sabemos que el Congreso tenga intención de ampliar el plazo”, recalcó.
Finalmente, comentó, Jóvenes Construyendo el Futuro es un programa prioritario del Gobierno de México, para atender a la juventud alrededor del país e impulsarla a desarrollar nuevas habilidades y competencias que faciliten su integración al mercado laboral.
Se trata de incluirlos y no permitir que la política sea llamarlos ninis, como en el pasado, sino colaborar con el sector productivo, con las empresas del país, para que los jóvenes adquieran experiencia de la mano de los tutores y empresarios que los acogen y los forman, y a su vez se benefician de su propio talento, energía y ganas, por lo que los invitó a formar parte del programa.
